Producción de hierbas aromáticas y hortalizas en invernadero . Parte 1 (de 4). Ubicación

Esta serie de cuatro publicaciones, tratará sobre la ubicación ideal de un invernadero, así como las estructuras y el ambiente propicio para el cultivo de hierbas aromáticas y hortalizas en el mismo. Aunque nuestro enfoque estará dirigido a la construcción de un invernadero, lo que se expone es igualmente aplicable a los ya existentes. Ahora pasaremos a la etapa inicial: encontrar el lugar idóneo para dicha edificación o determinar si su invernadero actual es apropiado para la producción de plantas y hortalizas.

La agricultura de invernadero se ha convertido en un método popular para el cultivo de hierbas aromáticas y hortalizas porque se puede proporciona un ambiente interior óptimo para las necesidades de las plantas. Un invernadero puede ser ubicado en tierra no fértil cuando se recurre a cultivos sin suelo. Por otra parte, es posible producir plantas durante todo el año, así se puede tener un mejor control de malas hierbas, plagas y enfermedades.

Además, en un invernadero se puede maximizar energía, espacio, tiempo, agua y nutrientes, para así obtener frutos y plantas de alta calidad con el más alto potencial genético. Lo anterior precisa tener en consideración las especies y las variedades de las plantas cultivadas (frutos, hojas, flores, etc.), la duración del ciclo de producción, la proximidad de los clientes potenciales, la fluctuación de los precios, la demanda, la rentabilidad de la inversión y otros factores que serán analizados en estas cuatro publicaciones.

Contar con las mejores estructuras, recursos ilimitados y los equipos más recientes no basta para garantizar la máxima calidad y rendimiento de las plantas, pero esto puede lograrse cuando los directivos invierten en contratar a personal capacitados y experimentados (en producción intensiva de plantas, ingeniería y control asistido por computadora) tanto para el manejo de personal como para la atención de las necesidades de las plantas. Dado que las plantas se desarrollan durante las veinticuatro horas, los siete días de la semana, la agricultura de invernadero constituye un método intensivo de cultivo. ¡No hay lugar para fallas, por lo que es indispensable contar con empleados confiables en el invernadero!

 

Tomates producidos en invernadero
Tomates producidos en invernadero.

Ubicación

Se trata de uno de los aspectos más importantes que se deben considerar cuando se planea construir un invernadero para la producción de hierbas aromáticas y hortalizas, o bien para cultivarlas en uno ya existente si se cuenta con espacio suficiente. Deben considerarse los siguientes aspectos:

Luz a lo largo del aña

La mayor parte de las plantas requiere de una cantidad específica de energía luminosa acumulada para desarrollarse y florecer. La luz diaria integrada (DLI) representa la cantidad de energía luminosa acumulada por día y se ve influenciada por la situación geográfica y la época del año. Por ejemplo, la DLI promedio en diciembre es de 12 mol•m-2•d-1 en Maine y de 23 mol•m-2•d-1 en el sur de Arizona, en tanto que en junio es de 43 mol•m-2•d-1 y de 60 mol•m-2•d-1 respectivamente. Mientras mayor sea la cantidad recibida de luz diaria por la planta, más rápidamente crecerá y dará frutos. A manera de ejemplo, los tomates requieren aproximadamente 1,000 mol•m-2 de luz acumulada para comenzar a florecer.

Humedad relativa

Es posible refrescar un invernadero añadiendo agua al aire seco; por lo tanto, es recomendable construirlo donde el aire durante el verano sea seco para favorecer el enfriamiento y reducir enfermedades foliares.

Temperatura

Este parámetro puede ser controlado para lograr un crecimiento óptimo. Se aconseja situar el invernadero en un lugar con clima moderado, puesto que la energía requerida para calentar en invierno y enfriar en verano será menor.

Viento

Un invernadero debe ser construido de tal modo que resista los vientos típicos de la región, cuyos efectos pueden ser minimizados mediante barreras físicas (vallados) o árboles.

Elevación

Produce un alto impacto en la temperatura del aire durante el año. Son preferibles las elevaciones altas.

Agua

Los elementos del agua deben encontrarse en niveles óptimos, incluyendo alcalinidad, sales totales disueltas y libres de contaminación química. La provisión de agua deberá bastar para afrontar la máxima demanda en los días calurosos del verano. Por ejemplo: durante el verano, cada planta de tomate requiere entre 3 y 4 cuartos de galón (entre 11,3 y 15,1 litros) diarios. Además, el agua puede ser empleada para refrescar el invernadero. El volumen de agua utilizado para tal fin puede ser tan alto como el destinado a la irrigación.

Transporte

Es preferible la cercanía con caminos pavimentados o vías férreas, ya que los caminos de tierra son irregulares, por lo que provocan sacudidas que afectan a flores y frutos, restándoles calidad. Por otro lado, estar cerca de las carreteras principales ayudará a que el producto llegue al mercado más rápido y con un menor costo.

Mercada

La mentalidad de los consumidores está cambiando y ahora compran productos locales debido a los efectos positivos de dicha práctica en la comunidad, a que los productos son frescos y a que la huella de carbono se reduce debido a que las distancias de transporte son más cortas. No obstante, existen grandes productores de legumbres de invernadero que expanden sus instalaciones anualmente. Ambos modelos de negocio deben ser considerados. Otros aspectos importantes son: la oportunidad de obtener el máximo beneficio durante el año, conocer las necesidades del consumidor y el mercado en que será vendido el producto.

Mano de obra

Para aprovechar el invernadero al máximo, es necesario producir durante todo el año. Los empleados deben trabajar en equipo los siete días de la semana y, en temporada alta, cubrirán horas extraordinarias. Deben conocer y aprender aspectos distintos acerca del desarrollo y la producción de plantas. Por ejemplo, se requiere de cuatro trabajadores por acre para producir tomate de invernadero.

Servicios

Se debe tener fácil acceso a la electricidad, el gas natural (u otros combustibles para proporcionar calor) y el teléfono. La electricidad es fundamental porque la mayor parte de los equipos funciona con ella. En cuanto al gas natural, el propano, el petróleo para calefacción; etc., son empleados como fuentes de calor. A usted le corresponde elegir la alternativa más económica.

Topografía

Trabajar en invernaderos con pendientes es más difícil, pues los trabajadores se cansan más fácilmente, se requiere de bombas más grandes para hacer subir el agua, las plantas pueden recibir volúmenes desiguales de ésta y, en terrenos irregulares, el agua de irrigación lixiviada se acumular. Además, será mejor construir el invernadero en un suelo con capacidad de drenaje adecuada para facilitar la salida de este líquido.

Expansión a futuro: los empresarios exitosos suelen expandir sus instalaciones. Busque lugares donde esto sea posible. Resulta más fácil y económico añadir un nuevo invernadero en el mismo lugar. Al realizar expansiones y estar comunicados los invernaderos, es posible compartir ciertos equipos y mano de obra; en cambio, su construcción en un sitio distinto podría implicar una nueva inversión en dichos conceptos, y gastar doble en cosas ya existentes.

Vista aerea de instalaciones de un invernadero
Vista aérea de instalaciones de un invernadero.

Ya sea que usted decida construir un invernadero o producir hierbas aromáticas y hortalizas en otro preexistente, es importante su ubicación. Una vez elegida, se pasará a la siguiente etapa: diseñar el invernadero. En la segunda parte de esta serie, abordaremos los factores que entraña la construcción de un invernadero.